Hablamos de Calabria

Nadie que no haya estado en Calabria, puede remotamente imaginar lo hermosa y rica que es esta tierra, como te puede envolver y permanecer en el corazón.
He visto a menudo como llegaban huéspedes a mi bed & breakfast, tanto italianos como extranjeros, asustados por todo lo que se dice mas alla de los límites de esta tierra "salvaje"; he visto el cambio de ánimo a las pocas horas de su llegada y los he visto regresar con sonrisas radiantes y expresión relajada en la cara después de un paseo por los alrededores. Todos hablan maravillas ya que descubren la belleza de los bosques, la vida en los fondos marinos que late vista a través de la pureza del mar, los colores de la naturaleza aquí más intensos y más brillantes que en otros lugares. Se sorprenden cuando descubren el calor de esta tierra en las sonrisas y en la disponibilidad de los calabreses, cuando detrás de el "salvaje" de esta tierra ven cultura, arte y ciencia que aquí son mas antiguas que el mismo idioma que aún vive en los países de "area grecanica" , cuando descubren su historia escrita por poetas y escritores, hijos de una tierra que ahora parece tan sorprendente.
Pensar en Calabria cuando estes fuera de sus fronteras, trae a la mente la idea de un lugar triste y estrecho, confinado en un remoto rincon del mundo, pobre, atrasado y patria solo de bandidos y mafiosos: que lejos està de la realidad esta visión! Vista desde su interior, a través de los ojos de los "sinceros" que no se dejen influir por ideas preconcebidas y sensacionalistas, para cubrirse de importancia porque se està denigrando toda una tierra y incluso a todo un pueblo o vista con los ojos del calabrese que siente su identidad y la pertenencia a su tierra, esta es "el pais de nunca jamas"; sus fronteras no son espacios estrechos sino sin límites: sus incontables kilometros de costa dilatan los espacios regalandote la emocion de una tierra sin fronteras y su posición de última tierra del Mediterráneo te da la sensacion que todos los lugares del mundo están al alcance de tu mano.
Es como la isla de Avalon, que va desapareciendo en la niebla, para volverse al final completamente invisible; ya muchos de los mismos calabrés han dejado de verla detrás de la niebla de la pérdida de su identidad cultural, detrás de la niebla de la desconfianza, la niebla de las expectativas frustradas. Hablemos de ella, hablemos de la Calabria y de su belleza, elegiamos la Calabria como se alaba a la mujer en el amor: podemos darle vida porque ella pueda vivir para nosotros y pueda regalarnos sus maravillas y asombrar a los que la habian visto solo como fea porque pintada por un pintor mediocre y sin talento.